El Encín Golf, Alcalá de Henares (Madrid)
Comento hoy un muy reciente de la Comunidad de Madrid, y para mí uno de los mejores. El Encín Golf fue inaugurado en el 2011 en una árida, seca y completamente llana finca a las afueras de Alcalá de Henares el estudio Von Hagge Smelek & Baril (liderado en este proyecto por Rick Baril, su hombre en Europa) proyectaron y construyeron una obra maestra, una adaptación casi perfecta de los links mas legendarios, con calles firmes y onduladas, bunkers de todas las formas posibles, obstáculos de agua retadores, roughs densos. Y como elemento más destacado y polémico unos greenes enormes y movidos como montañas rusas, que sólo ofrecen al jugador un elemento absolutamente fundamental en este juego: diversión a manos llenas. Cada green de este campo parece una versión en miniatura de los legendarios Himalayas de St Andrews. He oído criticar a estos greenes; hay quien piensa que son absurdos e irracionales. Que si son como un minigolf. Creo que merece la pena jugar un campo diferente: Von Hagge siempre buscaba que un campo emocione, que sean diferentes. Y lo han conseguido plenamente: este campo no aburre. En la imagen, parte del fantástico putting green del complejo y al fondo el campo de prácticas.
Robert Von Hagge falleció en 2010, y como siempre ocurre con los diseñadores su muerte paso relativamente desapercibida en la prensa deportiva (su vida también). Curioso deporte este que encumbra a los mejores jugadores y que condena al anonimato a los artistas que mas nos hacen disfrutar del golf. Porque el golf se disfruta jugando. El golf sufrió una perdida irreparable con la desaparición de este artista de la mesa de diseño.
El hoyo 1 nos enfrenta a la misma sensación paisajística que tenemos en un links, donde las apariencias engañan. En esta salida los bunkers parecen estar mas juntos de lo que están. Un grupo desordenado de bunkers en linea de green, y si uno no conoce el campo resulta dificil saber a que distancia estan.
Al llegar al green ya vamos comprobando que las superficies tienen muy poco de vulgares. Un auténtico tobogán. En este campo si uno quiere sacar birdies no tiene otro remedio que atacar a las banderas. Dejar la bola (sólo) en green suele ser garantía de tripateo.
El hoyo 2 es la confirmacion de que estamos ante la obra de un genio. Desde el tee de salida podemos contar alucinados casi una treintena de bunkers pequenos. El hoyo parece tener sarampión y uno puede decidir la mejor ruta al green. Otra pista de baile ondulada como una ruffle.
El hoyo 3 es un par 3 que cuenta con un green aplatanado y enorme. Un enorme waste bunker salpica todo el trayecto de la bola. Abundan las zonas arenosas que no son bunkers: es tierra dura y no hay rastrillos. Supongo que con ello se ahorra en agua y mantenimiento.
Nuevamente nos encontramos con un green sinuoso y retorcido. Clicken en la foto para agrandar y ver este green. ¿Cómo serían recibidos estos greenes por los profesionales? Cuando se disputó el Madrid Masters en 2011, Paul McIngley subrrayó que no le gustaban nada, pero que eran similares a los del Old Course o a los de Augusta National, dos campos icónicos. Son greenes dramáticos, jugables, francamente divertidos.
El siguiente hoyo es un par 5 en dogleg hacia la derecha. Los pegadores podrán llegar de dos a green con holgura. La zona de rough estaba, cuando jugamos, bastante despejada, lo cual permite acelerar el juego y ofrece líneas de tiro tentadoras. Un waste bunker enorme acompaña la calle por la derecha.
El hoyo 5 es un par 3 con un green alabeado y retorcido como todos, pero que particularmente presenta un reto adicional por su forma, abrazando un bunker en su lado derecho. Esto quiere decir que si la bandera está retrasada las bolas en el frente de green no tendrán línea de putt a bandera. Así que tocará intentar un approach peligroso o aceptar los dos o tres putts con resignación.
El hoyo 6 es un par 4 con una serie de bunkers pequeños salpicando la calle. El green está protegido por unos bunkers enormes en forma de ameba que lo rodean por todos lados. Este green comparte superficie con el green del hoyo 8.
El hoyo 7 nos da un respiro en cuanto a obstáculos de arena. Curioso hoyo donde sólo hay tres bunkers pequeños y bastante alejados de la línea ordenada de juego. Pese a ello es el handicap 3 del recorrido. ¿Quizá porque una zona de rough recorre la calle? ¿O por su green increíble?
El ocho comparte el green con el hoyo 6. Cuenta con una serie de bunkers que salpican la calle y los alrededores del green como las manchas de un test de Rorschach. Unas auténticas playas que hay que evitar.
Finalmente volvemos hacia la casa club con un par 4 de 418 metros; es casi un par 4 y medio, porque para llegar a green hay que pegar dos tirazos. Y además evitar un montón de pequeños bunkers que salpican la calle.
La segunda vuelta mantiene o supera el nivel de excelencia de este campo. El hoyo 10 vuelve a ser un par 4 en dogleg hacia la derecha a un green ligeramente elevado y de abruptas superficices.
Continuamos con un par 5 muy interesante, porque plantea dos enormes bunkers ameba en la distancia del driver de salida. Un pasillo muy estrecho queda por la derecha. También la opción de volar los bunkers (aunque con viento en contra se necesita pegar fuerte). O salir con madera o hierro y quedarse corto del bunker. En cualquier caso desde calle casi se ven más bunkers que calle.
Las emociones no terminan aquí, porque al llegar al green tendremos nuevamente que negociar con una superficie de montar. El green cuenta con una plataforma en su parte frontal derecha (donde estaba la bandera cuando jugué) desde la cual desciende hacia el fondo del green. Desde atrás vemos el hoyo más elevado que nuestra bola, con un desnivel brutal de metro y medio. Y si nos pasamos, la bola se sale de green con seguridad.
El siguiente hoyo es un par 3 largo, de 172 metros desde amarillas, pero con un green en alto y no excesivamente cómodo.
El hoyo 14 nos enfrenta a otro par 4 en dogleg hacia la izquierda. Bunkers de calle amenazan el tiro de salida. El green, algo elevado, cuenta, en palabras de mi compañero de partido, con más curvas que Marilyn Monroe. Aunque la comparación es anticuada, la definición es acertadísima.
El el 15 destacan un apreciable numero de bunkers que protegen al green en su parte izquierda y trasera.
El hoyo 16 par 3 es quizá el más emblemático del campo. Un par 3 a un green que recibe en diagonal y en el que hay que superar un lago. Dependiendo de la posición de bandera podemos tener un tiro de 130 a 160 metros. Y conviene tirar a bandera: el green vuelve a ser un tobogán tremendo.
Curioso hoyo el 17. Su hándicap bajo se explica por un green absolutamente surrealista, alargado como una salchicha y retorcido como una silla de montar. En este green cabe un par 3 corto. Con una bandera al fondo se convertiría en un hueso durísimo. Los bunkers que lo rodean son verdaderos obstáculos. Este es el green desde la parte de atrás.
Finalmente terminamos con el par 5 homenaje a Severiano Ballesteros. Desde el tee de salida hay riesgo de irse al agua si uno es pegador, por lo que interesa no aproximarse demasiado por la derecha. La calle es bastante ancha y deberíamos evitar el búnker…
Para el segundo tiro y la aproximación a green el lago amenaza nuestra precisión, y cómo no un fantástico grupo de bunkers protegiendo al green. Al fondo el hotel de 5 estrellas con restaurante y bar nos espera.
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Buen análisis del campo. En mi opinión es un campo que exagera las características que Von Hagge imprime a sus diseños: Greenes enormes y movidos, muchos bunkers y manejo de las perspectivas, como bien has comentado. El problema de este campo es eso; la exageración de todo ello. Sirva como modelo el gran campo del mismo diseñador: Empordà Links. Encuentro muchas similitudes entre ambos pero me parece mejor recorrido el de Gerona porque es más equilibrado.
Pienso que El Encín es una versión desproporcionada de Empordá.
Creo que El Encín puede resultar divertido, de hecho a mi me lo parece aunque me cuesta defenderlo con razones objetivas. Ese barroquismo hace que no sea un campo demasiado popular, y lo entiendo. Despierta en mi un sentimiento encontrado.
Un saludo y enhorabuena por tu gran blog.
Gracias por tu amable comentario. El Encín despierta sentimientos muy apasionados. A mi me encanta, pero entiendo que es in campo especial. Me parece bien que un diseñador se la juegue en la búsqueda de lo nuevo con el objetivo de divertir.